El circo de la mariposa

Este video lo vi hace dos años y es uno los videos que empezaron a cambiar mi manera de ver la vida aún cuando ni siquiera me imaginaba que estaba entrando a un mundo nuevo de aprendizaje y crecimiento personal. Se trata, pues, del cortometraje “The Butterfly Circus” (El circo de la mariposa) del director Joshua Weigel, este film está protagonizado por el motivador y conferencista internacional Nick Vujicic, si no lo conocen, no se preocupen, pronto se darán cuenta del diferente y especial ser humano que es, además, se cuenta con la co-protagonización del actor mexicano Eduardo Verástegui. Sin más ni más, con ustedes “El circo de la mariposa”.

La educación es a la vez un privilegio y una responsabilidad

Todos en cierta medida hablamos sobre la educación, es un tema que está presente en el día a día, no nos es indiferente. Cuando alguien se comporta de forma grosera decimos que “no tiene educación” o cuando conocemos a alguien con estudios de doctorado decimos que “tiene mucha educación”, cómo es posible que una palabra pueda ser aplicada tanto para hablar de los modales de una persona como de sus estudios y, sin embargo, el término es usado correctamente en ambas expresiones. Les soy sincero, no existe una definición universalmente aceptada de la palabra “educación” esto debido a que el término se puede usar en diversos ámbitos de la ciencia, la cultura, la tecnología, la información, los valores, la familia y un largo etcétera.

En lo particular, creo que la educación se podría definir principalmente desde dos rubros:

Educación personal: Es el proceso por el cual nos convertimos en mejores seres humanos.

Educación social: Es el proceso por el cual se transforma la cultura.

Hablo de procesos porque la educación no tiene fin, jamás terminamos de educarnos, es un error creer que la educación es sólo para los jóvenes, que sólo debemos estudiar hasta la universidad o si acaso hasta la maestría y pensar que ya no necesitamos aprender más, esto es falso, primero porque el conocimiento no es estático sino que evoluciona, se actualiza y segundo porque a cualquier edad se tiene la capacidad de estudiar y aprender nuevas cosas, no importa si tienes seis u 80 años.

Además, no debemos olvidar que la educación no sólo son estudios académicos, la educación también son nuestros valores, los modales, nuestras actitudes y comportamientos. El dicho “La familia es la primer escuela” tiene toda la razón, es la primera institución formadora de nuestras vidas, la familia tiene la obligación de educarnos para comportarnos afectivamente con los demás, ahí se aprende el respeto, el amor, la comprensión, la solidaridad, la empatía, la decencia, la honestidad, es la base. La institución que se encarga de educarnos para el mundo adulto, prepararnos con los conocimientos generales de la ciencia y de cómo vivir en sociedad, está representada por las escuelas de nivel básico (primaria y secundaria) y de nivel medio superior (preparatoria), la institución que se encarga de educarnos para una profesión se representa por la universidades con estudios de licenciatura y posgrado.

A su vez, se puede ya hablar sobre una educación de corte internacional donde la plataforma por excelencia es el internet, me refiero a la formación de disciplinas como el lenguaje corporal, educación emocional, técnicas de persuasión y seducción, relaciones interpersonales, ecología, ya había hablado un poco de esto en mi mensaje de bienvenida hace más de un mes, es por eso que mi blog se llama Educación Internacional.

La educación tiene muchísimas temáticas y poco a poco las iremos viendo, por el momento sólo quería hablar de su concepto general y de la importancia de ella en nuestras vidas.

Como conclusión me gustaría decir que entre más educación académica tengamos, más responsabilidades y compromisos tenemos con la sociedad, así es y así debe ser, la sociedad invierte mucho en formarnos y no podemos darnos el lujo de defraudarlos, no es coherente ni sano ver licenciados que quieran ver a los demás por encima del hombro, el estar preparados no nos hace superiores a los demás, al contrario, nos debe volver más humanos, más humildes. Si estamos educados demostrémoslo con nuestros modales y con una noble conducta.